Ahí estaba él, redactor de la
sección de deportes de Diario de Sevilla ya con todo recogidito y a punto para
irse a casa. Únicamente pendiente de que el árbitro pitara el final y se
confirmara la victoria de Costa Rica sobre Grecia en los octavos de final de la Copa del Mundo para darle al
intro, mandar la crónica y cogiendo camino para disfrutar de la compañía de la
familia.
Nuestro protagonista, llamémosle
Godofredo, intercambiaba mensajes de wassap con su señora tales como “Cariño,
¿cogiste el jersey?”, “Nena, hace 30 grados en la calle”, “Sí, pero tienes que
cruzar el puente”, “¿Está la niña en la cama?”, “Hace rato”, “Si estás despierta
cuando llegue candela, ¿no?” (aquí se añade emoticono de guiño con lengua
fuera). “Jajajajaja” (aquí se añade emoticono de besito con corazón).
Fue en ese momento cuando Gekas
disparó, Keylor Navas rechazó y Sokratis Papasthatopoulos remachó a la red el
empate.