No
se dejen engañar por las apariencias. Sí, es cierto, a este hombre le ponemos
una boina, una cazadora de borreguito con su zurrón bandolera, un bastón y lo
ponemos a dar chillíos y pasaría
desapercibido por el cabrero más recóndito de Sierra Morena, pero Vicent
Sanways es lo más parecido a un Lord inglés que ha tenido el Sevilla FC en su
historia, no en vano es el único jugador nacido en el país que vio nacer al mítico
grupo de Liverpool que ha tenido ocasión de jugar con el primer equipo
sevillista. A pesar de eso no se vayan a creer ni muchísimo menos que Sándwich
era todo un ejemplo de elegancia inglesa dentro del campo, no era ni siquiera
un rápido pero gratificante sándwich mixto sino más bien un sándwich de huevo frito que se desparrama al
darle el primer bocado y que te deja absolutamente perdido.
Nacido
en la capital inglesa en plena efervescencia del Swinging London, el 27 de octubre de 1968, mientras Londres era la
capital cultural del mundo, los Stones abrazaban la psicodelia y se aliaban con el diablo,
los Mods asumían los ritmos
jamaicanos que aterrizaban
en el país y Carnaby Street era el epicentro
cultural y de la moda
del país, Vinny fue creciendo en el país inventor del fútbol donde la fiebre
del deporte Rey había alcanzado su cenit definitivito un par de años antes de
su nacimiento al levantar
por primera (y única) vez en su historia la Jules Rimet en el Mundial
organizado en el país, por lo que no era raro que los “hijos” del Mundial se
interesaran por el fútbol desde su más tierna infancia. Así mientras los
ingleses pasaban del pop
y la psicodelia al rock,
del rock al heavy y al glam, del glam al punk y del punk al 2 tone, Vincent Samways
bajaba tarde si y tarde también a la verde pradera que había detrás de la casa
familiar para jugar durante horas y horas al fútbol con sus amigos del barrio.
Poco a poco fue introduciéndose en diversos equipos de la zona hasta que nada
más y nada menos que el "equipo de las ofertas
irrechazables", el Tottenham Hotspur's, le hizo un ofrecimiento de esos a los
que no puedes decir que no y lo incorporó a sus categorías inferiores. El bueno
de Vinny estaba en una nube y además no paraba de escuchar a los Madness, lo que le
daba un plus de motivación, por lo que no tardó en debutar con el primer equipo
Spur en el que se mantuvo de 1986 a 1992 llegando incluso a jugar con la
selección sub 21 en estos años y a disputar casi 200 partidos en el club de White
Hart Lane. Pero Vincent se dio cuenta de que lo que partía el bacalao en Inglaterra a
principios de los 90 ya no era la capital, sino el norte, en Madchester había fiesta
24 horas al día, la cultura rave daba sus primeros pasos,
los Stone Roses
estaban absolutamente on fire y Oasis
ensayaban sus primeras
canciones, así que pasó de la capital y se marchó muy cerquita, a
Liverpool, a la ciudad de sus admirados Echo & The Bunnymen,
pero para desgracia (o fortuna) de Ian McCulloch no se
marchó al equipo Red, si no al
Everton, donde no le fueron del todo bien las cosas, teniendo que salir cedido
en un par de ocasiones al Wolverhampton Wanderers, y al Birmingham City.
Sin
saber qué hacer ante su cuesta abajo futbolística inminente, le pidió consejo a
su madre y esta fue clara: “Vete a España, yo he estado este verano en
Maspalomas y es la hostia Vinny, tienen hasta una playa para nosotros, sol, paella,
sangría… el año que viene vuelvo a Mallorca o a Fuengirola, pero vuelvo”
Sanways
se quedó pensativo por unos segundos, se acercó al teléfono y llamó a su
representante “Quiero irme a Canarias ¿Qué equipos hay?” Su representante le
contestó que dos el Tenerife en primera y Las Palmas en segunda, “pues búscame acomodo
en alguno de los dos, preferentemente el de primera” le espetó el mediocentro
(¿No lo habíamos dicho? Pues sí, Sanways jugaba de mediocentro y a veces de
defensa central, tanta música, tanto rock inglés y de fútbol poquito…). Como en
Tenerife se rieron en la cara del representante cuando le propusieron al jugador,
éste se lo ofreció a Las Palmas, que tras dudarlo un poco aceptó contratar al
jugador mediada la temporada 96/97 para su interesante proyecto deportivo que
entrenado por Ángel Cappa contaba
con jugadores como el Turu Flores (que había sido el fichaje más caro de la
historia de la 2ª división), el futuro ex sevillista Ángel, Canales o unos
jovencísimos Valerón y Manuel Pablo, así que raudo y veloz Vincent Sanways pasó
a ser Sandwich para los amigos y se desplazó de un país donde triunfaban Suede, Blur o Elástica a otro donde el
nº 1 era Rebeca
(tampoco seamos injustos, en el 96 se hicieron discazos en España, además en Inglaterra lo que
realmente lo petaba ese año eran las Spice
Girl…).
No
tuvo un mal debut el bueno de Vinny pues nada más llegar jugó de titular contra el Alavés. En el minuto 13 de partido
le pegó una patona a un jugador sin
balón y el árbitro lo mandó a la ducha. Cuatro partidos le cayeron de sanción
al inglés que en 13 minutos ya había mostrado muchas de sus cualidades
futbolísticas. Tras la sanción reapareció contra el Salamanca y en el minuto 89
de partido le pegó una hostia a un jugador rival que le había escupido. Nuevamente
expulsado y otros tres partidos de sanción y la afición flipando sobre qué
clase de hooligan
habían traído al equipo. Decepcionado consigo mismo y con el entorno pensó en
que quizás se había equivocado al venir a la liga y que no debió hacer caso a
su madre, pero oiga, los distintos entrenadores seguía confiando en él y poco a
poco Sanways fue convirtiéndose en una autentica leyenda en Las Palmas durante
las seis temporadas que permaneció en el equipo insular, llegando a ser el
capitán del equipo y compartiendo vestuario durante todos estos años con
jugadores como Agostinho,
Bjeliça, Kowalczyk,
Tevenet, Olías, Jaime Quesada Jarni o Rubén Castro, consiguiendo un ascenso a
primera tras más de diez años y cuajando una buena primera temporada en la
élite y no tanto la segunda donde el equipo canario acabó descendiendo.
Fue
entonces cuando el Sevilla FC llamó a la puerta del veterano inglés (tenía ya
34 años) que acabó contrato con Las Palmas, necesitado de un centrocampista
agresivo y con galones. Aquí la afición pasaba de su apellido olímpicamente y
lo llamaba Sandwich o Changüi y tras
verlo jugar tampoco es que se mereciera cambiar ese apodo por algo más fino tipo baguette… Durante la primera vuelta Caparrós sí que le daba minutos
llegando a disputar hasta 10 partidos y mostrando una de sus jugadas estrellas:
El cabezazo
de la tortuga (técnica milenaria que ha sido imitada por toda clase de
cracks de talla mundial), pero el equipo iba a la deriva en cuanto a
resultados hasta que un inesperado 0-3 en el Camp Nou (con un golazo de Toedtli tras jugadón de
Marcos Vales) que provocó una histórica pañolada a Joan Gaspart hizo
reaccionar al Sevilla y a Caparrós, que tras ese partido solo alineó a Sanways
en dos ocasiones más y pegándose una segunda vuelta en la que jugó lo mismo que
Alfonso
o Tomás,
es decir NADA y en la que, todo sea dicho, el Sevilla jugó muchísimo mejor.
Tras
ver que sus servicios ya no eran apreciados pensó que quizás era la hora de
regresar a casa, así que fichó por el Walsall de la First Division pero el
panorama ya no era el mismo, primaba lo americano sobre lo inglés, ya no conocía
a los grupos nuevos y
él también había cambiado. Necesitaba el sol, la arena, la sangría,
achicharrarse la piel en la playa, sentirse guiri en definitiva, así que
estableció su residencia en Marbella (obvio) se ofreció
al Algeciras con el que jugó algún partido y se retiró definitivamente a los
36 años en el club gaditano. Actualmente dedica su tiempo a regentar
tranquilamente el discopub inglés que posee en Puerto Banús llamado en un
alarde fantástico de originalidad el “Samways Bar”, a entrenar al San Pedro de
Alcantara para no perder el mono futbolero y visitar
a viejos amigos y a contemplar el lado positivo de la vida,
que para eso es lo más parecido a un Lord que hemos visto por estos lares.
Por qué al Sevilla le dicen el menú de los pobres? porque son un sandwich y 10 papas fritas XXDD
ResponderEliminarInteresante revisión de un clásico amigo Alfonsobis xD
ResponderEliminar¿Estuvo en Algeciras? Lo mismo conoce a este hombre...
ResponderEliminarPD: Sin ánimo de lucro, camarero, un sandwich y una tortilla de patatas con pimiento y cebolla, hombreeee...