DÍDAC VILÀ ROSSELLÓ

Raúl Verdú Giménez nace en Gavá, provincia de Barcelona, el 11 de Enero de 1970. Su carrera como delantero no sería brillante, ya que apenas disputaría un par de temporadas en Segunda B defendiendo las casacas del Rubí y el Gavá. Con los rubinenses, pese al descenso conseguiría once goles en una temporada que...

¿Qué? No, no me he confundido. Que no, en serio. Que ni se me ha olvidado que éste es el homenaje a Dídac ni me he confundido de Verdú. Es que hay veces que los personajes secundarios de una historia cobran tanta relevancia que hay que darles su importancia. Ocurrió con Javert en la obra maestra de Víctor Hugo, ocurrió con el Joker en su versión Nolan, ocurrió con Don Pimpón en el drama rural 'Barrio Sésamo' y ahora ocurre con la supuesta historia de Dídac, que no puede desemparejarse de la historia de su representante, Raúl Verdú Giménez.

Un señor que como ya se ha dicho no tuvo una carrera futbolística brillante. Ni siquiera le daba para ligar pibones como a la mayoría de jugadores y tenía que tirar de Badoo. Sin embargo, fue listo para reinventarse y se hizo representante de deportistas, fundando la compañía Global Sports Advisors Gromenauer, que da cobijo a múltiples jugadores de fútbol y baloncesto, destacando en su nómina nombres como Albert Riera, Bruno Saltor, Carlos García, Jordi López Felpeto, Miguel Palanca, Tariq Spezie o Guillem Vives.

Cierto que ninguno suena a demasiado crack, sólo Riera alcanzó la internacionalidad por ejemplo, pero por lo menos pueden comer de esto con cierta solvencia. Pero eso no es suficiente, todo profesional necesita un reto, y cual Henry Higgins convirtiendo en señorita a Eliza Doolittle, fue retado a llevar a lo más alto del fútbol profesional a lo menos parecido a un futbolista que pudiera encontrar por ahí. Y es en este instante cuando entra en escena Dídac.

Un inciso, cuando veo un nombre catalán o vasco me gusta ver cuál es su versión en castellano. Tras una ardua investigación (primera entrada que sale al buscar en google) he encontrado lo siguiente:

"Dídac deriva del griego 'Didachos', latinizado en 'Didachus' que significa 'instruído, educado'. Algunos autores afirman que Didachus también es el origen de Diego, de lo que se desprendería que Dídac es la forma catalana de Diego. En este punto no hay acuerdo pues son muchos los que creen ver el origen de Diego en el nombre medieval Iago con la siguiente evolución: Iago-Sant Iago-Santiago-Tiago-Diago/Diego, de lo que se concluiría que Diego y Dídac son nombres con orígenes distintos".

Al ser Raúl retado por su particular Coronel Pickering en convertir en futbolista al instruído Didachos, un chiquillo estudioso con menos coordinación que...que...que algo sin coordinación (no ando fino hoy), consigue enchufar al joven nacido en Mataró el 9 de Junio de 1989, en la cantera del Español como lateral izquierdo.

Las pruebas a las que Raúl somete a Dídac para que se convierta en un profesional del balompié hacen sufrir a éste. Le obliga a jugar al fútbol con canicas en las botas para que adquiera gracia y habilidad, y el chico va progresando poco a poco hasta alcanzar el primer equipo blanquiazul y la Selección Sub21.

En el mercado invernal de la temporada 2010-11 Raúl cree que Dídac ya lo ha conseguido (He thinks he´s got it) y es por eso que le da la oportunidad de mandarlo a todo un Milán, pero en su puesta de largo en un grande no convence y apenas jugaría el último e intrascendente encuentro del campeonato.

Entonces empieza un rosario de cesiones. Tras volver a la seguridad del Español durante una temporada recupera cierto estatus y es por ello que el Valencia quiere ficharlo, pero incluso habiendo posado ya en Mestalla con la camiseta ché, no llega a concretarse el acuerdo por no pasar el reconocimiento médico debido a una lesión que el catalán arrastraba.

Finalmente la temporada 2012-13 la pasa en blanco, y es en el verano de 2013 cuando, atraído por la idea de que la lluvia en Sevilla es una maravilla, Raúl lo enchufa cedido en el Betis, pasando a formar parte de la maravillosa generación de Amigos de Kukleta del estío de aquel año junto a Andersen, Sara, Steinhöfer, Chuli o Verdú.

Jugaría 12 partidos de Liga. Entre su paupérrimo rendimiento y lo fácil que se partía su única aportación destacada fue un gol al Rubin Kazan en competición europea. Fue tan extraño verlo hacer algo bueno que el comentarista de la tele rusa gritó el nombre de Baptistao en vez del suyo porque su cerebro no fue capaz de procesar correctamente la información que sus ojos le mandaban.

Lo mejor que podemos decir de Raúl, verdadero protagonista de esta historia, es que no dejó tirada a su criatura una vez que superó el reto de llevarlo al fútbol profesional. Le encontró acomodo un año más en Primera, cedido en el Éibar la temporada siguiente y para la 2015-16 le ha encontrado un sitio en el AEK de Atenas, donde para recibirle le han hecho uno de esos maravillosos vídeos con sus mejores jugadas y música de fondo. En el vídeo podemos ver entre otros highlights cómo saca de banda, cómo protesta al árbitro, cómo saluda a excompis del Español o cómo cae lesionado tras un gol del rival.

Y ahí sigue Dídac. Ganándose la vida con el fútbol gracias a Raúl Verdú. Todo empezó con un futbolista de Segunda B que se hizo representante y un "no hay huevos". Cuánto daño han hecho los "no hay huevos" al mundo.