miércoles, 11 de mayo de 2011

PETROS MARINAKIS

 
Esta semana el Sevilla FC celebrará la Semana de la Afición en la que se contará como invitado especial con Vassili Tsartas y al leer la noticia, no he podido evitar recordar a otro griego que aterrizó en Sevilla el mismo año que Tsartas, por obra y gracia de la recién estrenada Ley Bosman, que posibilitó que una gran cantidad de jugadores que de otro modo no hubieran aterrizado por estos lares, llegaran al Sevilla en la temporada 1996. Hablamos de Petros Marinakis (o πετροσ μαρινακισ).

Nacido (según renaldinhos y pavones) la fresca y estrellada noche del 16 de diciembre de 1968, al son de las olas que rompían en la costa de la isla griega de Creta, Petros apuntaba maneras de buen futbolista desde la niñez, tanto que el míster del OFI Creta le dio los galones y la responsabilidad de la titularidad con tan sólo 20 años, destacando en el centro del campo como auténtico mariscal y líder del equipo. Después de 6 años en el equipo cretense, y previo paso mediante cesión por el siempre correoso Iraklio Kritis, fue traspasado al Olympiakos, club que a su vez tuvo a bien venderlo al Sevilla tras llamar la atención de los secretarios técnicos del club hispalense tras dar una asistencia de gol a Sapanis en la vuelta de la eliminatoria de dieciseisavos de final de Copa de la UEFA que enfrentó a los de Nervión con el equipo ateniense (La del mítico gol de Suker), así como el buen sabor de boca que dejó en la ida en el Ramón Sánchez Pizjuán (la del no tan mítico, pero no por eso igual de importante, gol de Juanito de rebote con la cara, tras despeje del portero en el minuto 90).
Nuestro melenudo amigo (tercer finalista en el concurso de Pelo Pantene en 1995), que pronto fue comparado con Simeone, llegó ilusionado al Sevilla con un proyecto, en principio, realizado para copar los puestos altos de la tabla, así el Sevilla había contado con los servicios del entrenador de moda en aquellos días (José Antonio Camacho), había adquirido grandes promesas de la época como Matías Almeyda, Gómez, Aranalde o el mismísimo (en pie) Colusso, a la par que despuntaban nuevos canteranos como Pepelu o José Mari y se fichaban a estrellas ya consagradas como Mornar o Bebeto, además de su compatriota Tsartas, en lo que prometía ser un cóctel que garantizaría el éxito y que ilusionó a una afición sedienta de éxitos. Por otro lado,  los directivos vieron en el internacional heleno y en su melena desbocada muy del estilo de Pasión de Gavilanes, amén de su gran parecido al uno de los integrantes de Locomía y su aspecto rudo y varonil, una oportunidad perfecta para hacer del jugador todo un ídolo de quinceañeras y jovencitas, capaz de forrar carpetas, copar portadas de la Super Pop y romper el mercado de venta de camisetas y merchandaising, lo que rentabilizaría económicamente su fichaje en muy poco tiempo… Pero pronto empezaron a torcerse las cosas.

El Sevilla no funcionó como se esperaba e inicio la temporada de forma catastrófica, recibiendo multitud de críticas y Marinakis, lejos de ser ese ídolo juvenil o de parecerse al jugador que había alcanzado la internacionalidad en cuatro ocasiones, acabó convirtiéndose en Maripaquis, sin llegar a convencer nunca ni a los técnicos ni a los aficionados, por lo que el partido contra el Deportivo de la jornada 15 de liga fue el último que disputó nuestro fútbol, antes de regresar en el mercado invernal a su país, dejando un balance muy poco halagüeño en nuestro fútbol:  667 minutos repartidos en 11 partidos, dos tarjetas amarillas (curiosamente en sus dos únicas victorias como sevillista), y la sensación de que estábamos viendo en directo a uno de los peores fichajes de la historia del Sevilla, que esa misma temporada descendió a segunda división.

Tras esta mala experiencia, Maripaquis volvió al calor del hogar (no sin antes recomendar a primos y hermanos las bondades de la ciudad que él no pudo disfrutar), a los guisos y yogures caseros que cariñosamente le preparaba su querisísima madre y en el OFI Creta volvió a ser feliz, obsequiando a los aficionados de su equipo de toda la vida, sus últimos años de futbol al máximo nivel y retirándose gentilmente cuando vio que ya no era del todo necesario, para dar sus últimos toques al balón como jugador profesional en el ilustre Etnikos Asteras y más tarde, en el A.O. Patraikos Patra, donde por fín colgaría las botas en verano de 2002.

Y esta es la historia de cómo este centrocampista de sedoso pelo y carnosos labios llego a formar parte de una de las peores plantillas de la historia del Sevilla FC, que será maná caído del cielo a hora de buscar jugadores con los que poblar este humilde rincón.

8 comentarios:

Rinat Rafaé dijo...

Señores, ojo a la alineación del Sevilla en el encuantro de ida contra el Olimpiakos: Un 5-3-2 formado por: Unzué, Ferreras y Pedro en los laterales, Prieto, Diego y Martagón en el centro de la defensa, trivote con Peixe, Moacir y Moya y Carlitos y Suker arriba.

Por si hubiera que apuntalar aun más la defensa, saca a Peixe y mete a Juanito, por lo que juega con un sistema de autentico tiki taka: 6-2-2. También jugaron Monchu y Marcos, pero fueron cambios de hombre por hombre... Ya no nos acordamos de este tipo de Sevilla...

Joaquin dijo...

joe, que grande el gol de suker es uno de mis mejores recuerdos!! como lo celebré!! y el sistema, como apunta Rinat Rafaé, anda que lo iban a permitir los "sevillistas de finales"!! jajaja

El maripaquis este, lo único que se recuerda, es el pelo!! el nivelito que desplegaría el tio...

Jose MME dijo...

Reclamo completar el particular infierno griego sevillista con Niklos Machlas.

Señor dijo...

Eso Eso!! Machlas, Machlas!! Y contad como le intentó pegar un puñetazo a un policía enfrente de económicas por pararlo por ir a 120 Km/h!!

El Compadre dijo...

buen artículo, compare, vuelves a subir el listón, me vas a hacer esforzar con la caló que hace.

y recuerdo en la lejanía algo de lo de machlas de querer darle a un policía...ya tienes trabajo

Rinat Rafaé dijo...

Tsartas entrevistado en directo en el Facebook del Sevilla FC. Le hemos preguntado por Marinakis y Tsartas ha dicho que tuvo un problema personal grave, que su madre estaba enferma en Creta y que no estaba centrado por este motivo, de ahí su precipitada vuelta a Grecia en diciembre.

Posteriormente ha contado que a él le pasó algo "parecido" porque tuvo una niña y no le dejaba dormir por las noches y al final de temporada le pasó factura la falta de sueño xD

Rinat Rafaé dijo...

Me acabo de dar cuenta que tras el fallo general de blogger se ha borrado el comentario donde contabamos que en el Facebook del Sevilla y con motivo de la semana de la afición habían entrevistado a Vassilis Tsartas. Desde Amigos de Colusso contra Amigos de Kukleta, le preguntamos por qué creía que Marinakis no triunfó en el Sevilla y Tsartas contó que cuando llegó su madre cayó enferma y estaba bastante descentrado por este motivo, de ahí su precipitada salida a su hogar de nuevo.

Vassilis también comentó que a él le pasó algo parecido, ya que bajó su rendimiento al tener su primera hija ya que ésta no le dejaba dormir por las noches.

Adolfo dijo...

Tengo que hacer un pequeño apunte, pero creo que habéis puesto una foto de Mario Vaquerizo (auténtico rudo y varonil). No me puedo creer que haya un jurgolista con ese pelazo.