lunes, 21 de enero de 2013

AHMED EL-SHENAWY

 
Desde orillas del Nilo, allí donde por las noches el rumor de las pequeñas olas silenciosas arrecian la ribera del vetusto rio sagrado bajo un manto estrellado conformado por la grandiosidad del firmamento, desde una tierra cuyas milenarias arenas han presenciado imperios, guerras, epidemias, nacimiento de reyes y milagros varios, desde un lugar no tan distinto a éste, donde también han contemplado el nacimiento de faraones, trileros e incluso del Risitas, llegó hasta nuestra ciudad uno de esos tipos de jugador sobre los que más nos gusta hablar. Sé que lo hemos repetido varias veces a lo largo de estos casi dos años que llevamos martirizando a nuestros lectores con las paridas que salen de las mentes creadoras de esta bitácora, pero que quieren que les diga, aquellos futbolistas que estuvieron a prueba por unos días, pero no llegaron a formalizar contrato con  el club en el que ilusionados, trabajaron durante unas semanas son una de nuestras debilidades. Son un tipo de jugador distinto, un jugador que rara vez se queda en la memoria del aficionado medio, si bien tienen durante unos días sus minutos de gloria y expectación en la prensa local.

Ya hemos analizado varios casos en este blog y sin ánimo de ser repetitivo, permítanme recordarles a los Gareca, Adilson, el hijo de Biri Biri, Ivonaldo, Carlao o Dani Fernández, pero es que en este caso se añade el plus de llegar de país con tan poca tradición futbolística fuera de África como Egipto, por lo que parece más que comprensible que cuando leímos que estaba a prueba con el Betis el último jugador de estas características que ha pasado por la ciudad, el portero egipcio Ahmed El-Shenawy y que finalmente se desestimó su contratación, se nos hicieran los ojos chiribitas y supiéramos de inmediato que estábamos ante uno de esos hombres que con el paso del tiempo solo son recordados por los aficionados más completistas y que más tarde o más temprano pasan a formar parte de la ilustre y bicentenaria nómina de jugadores que tan orgullosamente forman parte de esta casa.

El-Shenawy es (¿era?) un prometedor y joven portero nacido en 14 de mayo de 1991 que durante el pasado mes de las flores estuvo entrenando durante unos días, primero con el Betis B y posteriormente con el primer plantel a modo de prueba. Se especulaba que podía ser un fichaje de futuro de cara a reforzar la portería dada su meteórica trayectoria en su país de origen. El jugador que había militado hasta entonces en el Al-Masry de Port Said y ya era internacional absoluto, había sido tentado por el Zamalek (uno de los clubs más importante de Egipto), pero había preferido probar suerte en Europa y ser cola de león antes que cabeza de ratón.

Tras varios días compartiendo vestuario con los de Pepe Mel y algunos entrenamientos, el Betis desestimó su fichaje del que se presumía iba a ser el abanderado de su selección en los Juegos Olímpicos en favor de otras opciones que contemplaba la secretaría técnica, no llegando a enfundarse la camiseta verdiblanca ni siquiera en un partido amistoso de los que el Betis suele jugar de vez en cuando entre semana en la provincia.

Tras el varapalo que le supone no ser contratado por los béticos El Shenawy no se rinde y decide seguir intentando demostrar su valía por lo que prueba en diversos equipos como el Al-Kalat de Guadaira, el  Al-Habin Al-Haban Alabimbomban, el Wadi La  Al-Gabat, el BT Al-Cara Jho (al que llega por recomendación del comentarista deportivo El Rafat Al-Mansat) el Al-mejha Shorreante o el Al Hamedat D’hercules, pero finalmente todos y cada uno de estos equipos desestimaron su fichaje no encontrando nadie que requiriese de sus servicios, por lo que decidió pasar al plan B y colgar su curriculum en Infojobs. Pasaban los días y el portero se desesperaba viendo que no recibía llamada alguna a pesar de que se apuntaba a todas y cada una de las ofertas de empleo que salían en la popular web, fue entonces cuando el dueño del Doner Kebab de la calle Torneo lo reconoció gracias a que era hincha del último de los equipos en los que estuvo probando. Tras invitarlo a un delicioso té y conversar animosamente con él decidió darle una oportunidad en su negocio. Quizás no sea el trabajo que el bueno de Ahmed había pensado para él como profesión, pero a pesar de ello y de las bromitas que tiene que soportar de sus compañeros turcos debido a su origen egipcio lo realiza con esmero con la loable ilusión de aprender algo nuevo cada día.

4 comentarios:

Faraón de Santiponce dijo...

su agente era Ramses, el de los pañuelos de Plaza de Armas que se disfraza de egipcio, él lo trajo a Sevilla y lo intentó colocar en todos esos equipos que mencionas, incluido el Betis. Mi favorito el Wadi La Al-Gabat

er Fali dijo...

¿Kebab que es el tronchaco ese de carne que cortan así p'abajo? Me voy a comer yo uno de esos ¡¡UN CARAJO!!

Jean Sol Partre dijo...

Un único comentario para completar el currículo, ya que con los datos que yo manejo, falta la temporada que jugó en el Al-Tozano de Triana, después de dejar el Al Hamedat.

Rinat Rafaé dijo...

Había escuchado rumores del interés del Al-Tozano por hacerse con sus servicios, Jean Sol, pero creo que finalmente rompieron negociaciones cuando se reunieron en el mismo Doner Kebab y no llegó a enfundarse la camiseta de tan ilustre club, aun así a ver si algún lector conoce realmente que mamoneo hubo con El Shenawy y el Al-Tozano y nos lo puede explicar mejor...