Marius Stankevičius nació el 15 de
julio de 1981 en el seno de una familia donde jamás le faltó el cariño, sobre
todo materno. Su madre se preocupaba de meterle el pijama en la secadora antes
de acostarse, de acurrucarle en la cama cuando se iba a dormir, de prepararle
la ropa con la que ir al colegio, el cola cao con galletas para desayunar y le
envolvía con mimo el bocadillo de fuagrás en papel de plata para la hora del
recreo. Era un chico feliz, pero los demás niños solían ser cruel con él. En la
hora del descanso lo dejaban de lado y no le invitaban a jugar al fútbol con
ellos y cuando toda la clase participaba para jugar al 1X2, se compinchaban
entre ellos para ir a por él y se ensañaban al darle collejas, lo que hizo que Marius
se volviera un niño retraído y esquivo. Su madre preocupada veía que ya no
esbozaba la sonrisa a la que le tenía acostumbrado y que la chispa en sus ojos
se había apagado, con el consiguiente estado de preocupación de toda la familia
que no sabían qué hacer para contentar al chico. Un día mientras los demás
niños jugaban, Marius se encontraba solo sentado contra la pared cuando una
pelota se fue fuera y llegó a sus manos. Sus compañeros el gritaron “Eh tú
pringao pasa la pelota ya” y el chico encorajinado cogió el balón con las manos
y la lanzó con todas sus fuerzas a tomar por el mismísimo culo. Los niños con
la boca abierta no salían de su asombro de la extraordinaria fuerza que tenía
aquel pardillo en sus brazos y entendieron de inmediato que aquella podía ser
el arma secreta de la clase en el campeonato del colegio, por lo que le
invitaron inmediatamente a jugar con ellos.
Los
saques con la mano de Stankevicius hicieron verdadero furor y los alumnos se
amontonaban a borbotones para verlos de cerca, convirtiéndose en la autentica
estrella de las aulas, lo que devolvió la alegría al rostro del antes apagado
impúber, incluso se interesaron por él los chicos más populares del colegio, es
decir los del equipo de baloncesto, deporte que es el que de verdad partía la
pana en Lituania, pero Marius ya había sido un outsider y quería seguir
teniendo ese halo de misterio a su alrededor que veía que incluso le ponía
burraca a ciertas chicas, así que ahora que estaba en lo más alto de su
popularidad no quería cagarla.
Con
tan solo 17 años el FK Ekranas (equipo hermanado con el Cantarrana) se hace
con sus servicios adelantándose a los grandes del fútbol lituano, el… esto…ejem…bueno, cualquiera que sea el mejor equipo de Lituania (¬¬), porque Stankevicius y su
poderoso saque de banda querían triunfar desde la sombra, con dos cojones, por
ello cuando su fama comienza a ser mundial y empiezan a lloverle ofertacas del
Manchester United, del Milan y del Bayern de Munich, él las manda tan al carajo
como sería capaz de enviar una pelota con sus manos y sorprendiendo a todos
ficha por el Cosenza Calcio 1914. Una temporada es suficiente para que conozca
la cultura y el idioma local y dé el salto al Brescia donde coincide con
Guardiola, Roberto Baggio, Luca Toni o Andrea Pirlo que pronto se benefician de la fantástica táctica que
ofrece el lituano catalogándolo en petit
comitè como “la
autentica arma secreta del equipo”. Tras siete temporadas abandona el club Biancoazzurri con destino a Génova y ficha por la
Sampdoria convirtiéndose al poco de llegar en el ídolo de la afición, que
ilusionada con él lloró desconsolada cuando un año y medio más tarde los
dirigentes deciden cederlo incomprensiblemente al Sevilla, que andaba buscando
un lateral derecho que pudiera actuar como central por la baja indefinida de
Sergio Sánchez.
Marius
se fue porque pensaba que ya era hora de mostrar en Champions quien era él y
para la afición era un regalo
de Reyes de autentico postín por lo que blanco y en botella, pero un
reducido grupo de escépticos no veía con tan buenos ojos ese fichaje. Es más le
recodaba sobremanera a Juanmi,
es decir un jugador con potente saque de banda pero absolutamente nulo para lo
demás. Stankevicius oyó esos rumores y se creció en sus primero partidos, dando
un nivel bastante aceptable y ya se rumoreaba incluso que pagarían los 3
millones de euros estipulados para quedarse
con él en propiedad, pero poco a poco volvió a sentir el regusto amargo del
rechazo que había sentido en sus años mozos cuando parte de la afición comenzó
a tomarla con él. A pesar de que empezó bien se fue diluyendo, hasta acabar en
la total oscuridad futbolística, así que el Sevilla decidió no ejercer la
opción de compra y dejarlo volver a la Sampdoria, lo que al pobre Marius
no sentó muy bien, pues el chico estaba ilusionado en quedarse, pero como
se llevó una Copa del Rey en el zurrón pues el chavalito se fue un pelín más
contento.
Como no
quería seguir en la Sampdoria le dijo a su agente que aceptara alguna de las
ofertas que llegaran y una de ellas fue la del Valencia, que había oído hablar
de sus
portentosos saques de banda y tenían ganas de probar este arma infalible
con la que el lituano había anotado tantos goles. Juega tan solo un poco más
que en el Sevilla, pero convence lo mismo así que al finalizar la campaña
vuelve de nuevo a la Sampdoria que había descendido a la Serie B, por lo que vuelve
a dar orden a su agente de que le busque equipo. Sonó
con fuerza el Betis, pero finalmente fue la Lazio la que se hizo con el
lituano y ahí sigue, pensando en qué camino tomar para su futuro pues con mucho
tino ha abierto una vía profesional paralela y ha decidido probar suerte en su verdadera vocación, ser
actor… y casi que le va mejor.
7 comentarios:
Pique al balón prisionero entre Stankevicius y Juanmi.
Ni "Juego de Tronos" ni mierdas, serie buena era "Bola de Dan":
http://www.youtube.com/watch?v=QD_VQEjwXuw
Reventando a los rivales con sus saques de banda, al más puro estilo Scotta!
Pues me acuerdo que uno de los primeros partidos de Stankevicius fue uno entre semana (¿Copa?) que jugó de central y no lo hizo nada mal, tenía mucha colocación y por alto iba bien. Pero de lateral era un tronco, no tenía cintura y recordaba sobremanera a Zigor "Robot" Aranalde.
Eso sí, en aquel partido había en la fila de delante unas quinceañeras que no paraban de chillarle lo bueno que estaba. Vale que el tío tenía buena planta, pero es que las chavalas estaban más calientes que el queso de un San Jacobo.
Aprovecho para pedir una entrada sobre Luque II, jugador con nombre de banderillero que debutó con Julián Rubio la temporada del descenso... que digo del descenso, ¡del fichaje de Colusso!
Esta entrada es puro colussokukleteo, de las que me gustan vaya... enhorabuena
Opino igual, me gusta ese toque sarcástico-ficticio que le dais a la historia de algunos jugadores, bravo!
Wenisimo el articulo,menudo paquetón,el Monchito cada vez más está poblando esto de sus grandes adquisiciones gracias a la antena parabólica de su secuaz orta.Espero ansioso cdo hagas tu articulo sobre la mezcla de Etoo y Drogba llamado Babá y sobre Tom de Mul 2 llamado Stevanovic.Tambien te propongo humildemente que podrias tb hacer un articulo sobre traidores, y ahí podías meter a Jose Mari,Hibic,Juande Ramos,Baptista,Nico Olivera,,Sergio Ramos.Para mi todos se portaron mal con el Sevilla a su manera por no querer renovar o por lo que sea.Un abrazo y seguir así pq es genial esta pagina.
Gracias Jose María!
A su tocayo Jose Mari puede encontrarlo aquí: http://colussoscontrakukletas.blogspot.com.es/2012/01/jose-maria-romero-poyon-jose-mari.html
También puede encontrar algunas referencias de Hibic, Juande Ramos y Sergio Ramos
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