EL HIMNO AL SEVILLA DE MUSIQUITO

No se lo voy a negar, este tipo de frikadas me encantan. Por algo esta es la web más freak de todo el fútbol sevillano (título que nos hemos autodesignado pero del que dudo alguien pueda negarnos ser merecedores). Si hace poco le mostrábamos las bizarras composiciones (y confesiones) de Luixy Toledo y su canción (¡temazo!) dedicada al Betis, hoy les mostramos a otro de los grandes de la cultura bizarra para brutos mecánicos española: el inigualable Fernando Gramaje Ortega, artista más conocido como Musiquito.

Musiquito saltó a la fama gracias a aquel legendario programa de variedades presentado por Jordi Estadella y por aquella diosa francesa que despertó la curiosidad de miles de púberes de la época llamada Marlene Mourreau (sigue estando pollua la señora) en el que cualquier artista que tenía (o pensaba que tenía) un talento podía mostrárselo al mundo para que un público soberano lo aplaudiera o lo despidiera entre abucheos y cacerolazos, hablamos lógicamente de El Semáforo. Quizás el talento patrio más importante surgido de este entretenimiento televisivo fuera el ininteligible Cañita Brava, pero si indiscutible es el primer puesto igual de irrefutable es concederle el segundo a Musiquito, cuyo hit “¿Dónde está la mosca?” (Que tuvo hasta su versión inglesa) y su inimitable forma de bailar rompieron las pistas de todos los disco pub de interior en aquellos veranos de mediados de los noventa.

Musiquito era sevillano y sevillista, así que no dudaba en dedicarle canciones al equipo de sus amores ataviados con su clásica segunda piel de mosca a la par que el hombre orquesta-dj-musical producer le daba tono, todo observado por Nuestra Señora de Los Milagros que atónita, desde la pared, observa el percal como podemos contemplar, no sin cierta estupefacción, en el video que hoy les presentamos. 

Allá donde le invitaban, Musiquito cantaba y si tenía que cantarle a Del Nido pues le dedicaba unas coplillas con su particular estilo, como pueden observar en este otro impagable documento gráfico del que recomendamos encarecidamente su visionado aunque sea tan solo por verlo con esas hechuras de jugador antiguo que todavía mantiene el tipín en un partido de veteranos.  

Como los grandes genios de nuestro tiempo Musiquito se nos fue hace casi un año y medio y solo cuando se tuvo conciencia de su ausencia se reconoció lo impagable de su pérdida.