LA FIESTA DE DISFRACES DEL SEVILLA FÚTBOL CLUB

Buenas y elegantes tardes, como diría Señor.

La vida del futbolista es dura e injusta. Tienes que currar en fines de semana y te pierdes casi todas las fiestas. Y eso, entre chavalería sana como son los deportistas, pues da coraje. Porque sí, porque está muy bien avanzar rondas en la Europa League, pero resulta que hay que ir a Eslovenia a jugar con el Maribor en pleno febrero y nos perdemos el carnaval como ya nos perdimos la fiesta de Halloween de este año a la que Benjamín nos había invitado.

Pero a grandes males grandes remedios debió pensar Carlos Bacca. Si no podemos ir al carnaval, el carnaval vendrá a nosotros, y viendo que había unas horitas libres tras el Sevilla-Levante invitó a sus compis a casa a disfrutar de una animada noche con los más variopintos disfraces.

 

Cala y su prometida fueron avisados tan a última hora que no les quedó otra que tirar del disfraz más estándar de todos los tiempos. Un poco de pintura y cuatro detallitos y ya somos dos divertidos payasos dispuestos a animar cualquier boîte. ¿Cómo están ustedeeeeeeeeeeees? Pues bien, gracias, vamos séptimos. Hay quien está peor.

Fazio fue el príncipe de la afición nervionense tras su tremenda batalla con Diego Costa la pasada jornada. Lamentablemente no estuvo tan afortunado en el duelo frente al Levante, lo que le convirtió en el sapo de la grada. Para su fortuna siempre está ahí su preciosa princesa Tiana para darle el beso de amor verdadero que le devolverá a su ser original para que todos puedan ser felices y comer perdices.

 

Lo reconozco, siempre me ha caído bien Javi Varas. Tiene cara de buena persona, le prestaría diez euros si me los pidiera sin dudarlo. Beñat está de acuerdo conmigo. Y ahora me cae mejor todavía, tras verlo sonreír a cámara junto a su señora y el pequeño Varitas dispuestos a darnos toda su amistad cantando “Hay un amigo en mí”.

Cuando era pequeño Nico Pareja salía con sus padres del estadio de Argentinos Juniors cuando un ladrón les asaltó. Se llevó el collar de perlas de la madre y revenío el pequeño le dijo a su padre “Los delincuentes son supersticiosos y cobardes. Sí, padre, seré un murciélago”, a lo que su padre le respondió con una colleja mientras le decía “como sigas gastándote la paga en tebeos te vas a quedar tonto perdío”. Al pequeño Nico no le quedó otra que buscarse las habichuelas como futbolista, pero gracias a la fiesta de Bacca pudo cumplir su sueño de convertirse en el Caballero Oscuro.

Esto nos encanta. En un blog donde tienen cabida tanto béticos como sevillistas no podemos ser más felices al ver a los superhéroes de DC y Marvel unidos en sana camaradería. Ahí tenemos a Perotti como el Capitán Argentina América, aunque entre el azul, las rayas rojas y blancas, la estrella y la A bien podría ser un disfraz de escudo del Atlético de Madrid a falta del oso y el madroño. Junto a él tenemos a Spiderman Cristóforo, celoso de guardar su identidad secreta y que se sube por las paredes cuando Emery no lo pone.

¿Y quién es Superman? No le reconocemos, aunque sabemos de otros jugadores que estuvieron en la fiesta. Podría ser uno de ellos, para que luego digan que cómo la gente no reconoce la identidad secreta de Superman si sólo se quita las gafas y se cambia el peinado. Pues ahí está. Yo apuesto a que es M´Bia.

Y otra gran duda es, ¿dónde está el anfitrión? Se nos ocurren varias opciones, pero yo personalmente apuesto porque va disfrazado de Charlie, de “Los Ángeles de Charlie”.

NOTA: Depende de a quién le preguntes te dirá que la fiesta la organizó uno u otro. ¿Qué más da? Lo importante es divertirse.