Si pedimos a nuestros lectores
que nos citen alguno de los entrenadores más carismáticos de principio de los
90 seguro que rápidamente les vendrá a la cabeza, entre otros, el nombre de Ramón
Blanco, mítico entrenador que con el que el Cádiz logró permanecer varias
temporadas en primera en ocasiones de manera casi milagrosa, lo que le hizo
ganarse la simpatía de buena parte del respetable futbolero. No es difícil
visualizar la imagen de Ramón desgañitándose dando órdenes a los Dertycia,
Chico Linares (por favor no te vayas al Milan), Quevedo, Cortijo,
Carmelo o Mejías con su clásico bigote, pero si pretendemos que visualicen
al otrora entrenador del Cádiz como jugador la cosa cambia y serán pocos los
que sean capaces de dar datos concretos sobre su trayectoria.
Ramón Blanco Rodríguez nace en la
localidad coruñesa de Vimianzo el 20 de febrero de 1952, pero las pocas
posibilidades de prosperar económicamente hicieron que como tantos gallegos de
forma masiva (lo que fue el origen de la denominación genérica de “gallego”
para todos los españoles radicados en Sudamérica) su familia emigrara a
Argentina siendo él muy niño instalándose en el humilde barrio
de Boca bonaerense. No le fue difícil encontrar nuevos amiguitos y junto a
los demás niños aprendió, además de deliciosas recetas con dulce de leche, el
gusanillo que te entra en el cuerpo por la pelota, siendo habitual verlo
corretear en las calles con otros pibitos improvisando partidos con simplemente
dejar las mochilas en el suelo a modo de portería. Era lógico que entrara a
formar parte de alguno de los clubs deportivos de la ciudad y lo hizo en el
Sportivo Italiano en el que va progresando hasta que debuta en segunda con tan
solo 17 años, lo que llama la atención de grandes equipos argentinos como el
Independiente de Avellaneda, sin embargo no fructifica el pase a los Diablos
Rojos y Ramón decide dar el salto al charco para aceptar la oferta de un
Mallorca en segunda división en el que permanece una temporada antes de que su
buenas actuaciones le valieran su pase a primera división en la temporada 1974/75 de la mano del Betis
que vio en el coruñés un jugador perfecto para complementar su plantilla dada
su polivalencia en el mediocampo.
Sin embargo la competencia era
grande y Blanco (como era conocido futbolísticamente) no llega a hacerse con un
puesto de titular viéndose tapado por centrocampista de mayor peso en la
plantilla como Cardeñosa a la hora de disputar minutos por lo que no logra
asentarse en el club verdiblanco pasando completamente desapercibido durante
las dos temporadas en las que perteneció al club verdiblanco en las que tan
solo disputa un total de 14 raquíticos partidos (solo 4 como titular), dándose
el gustazo, eso sí, de compartir vestuario con gente tan querida en esta casa
como Atila
Ladinsky, Mendieta
o García
Soriano.
Finalizado su contrato decide
aceptar la oferta del Cádiz donde permanece durante cuatro temporadas a buen
nivel quizás motivado por mirarse al espejo y verse como un autentico hombre por tomar la decisión
de comenzar a llevar su característico
bigote, logrando en la primera de ellas el primer ascenso a primera de toda
la historia cadista, comenzando de esta manera una larga historia de amor no
solo con capital gaditana, si no con toda la provincia, ya que una vez se marcha del
Cádiz y tras un breve paso por el Recreativo, termina su carrera en equipos
como el Rácing Portuense o el Chiclana.
Una vez cuelga las botas decide
seguir dedicándose al fútbol y comienza su carrera como entrenador en la
cantera del Cádiz CF hasta que por fin le llega la oportunidad de entrenar al
primer equipo al que llega a salvar en un par de ocasiones de manera épica,
heroica y como decíamos al principio casi milagrosa. Tras abandonar el Cádiz
continua su carrera en el Marbella, vuelve al Cádiz de nuevo como apagafuegos,
sin lograr el preciado ascenso de categoría y tras esta segunda etapa se
despide de “su” equipo para seguir su carrera como entrenador en diversos
equipos como el Almería, Granada, Torredonjimeno o el San Fernando, en la que
ha sido hasta ahora la última aventura en los banquillos del gallego que desde la
temporada 2003/04 no ha vuelto a ejercer
de míster, matando el gusanillo actualmente comentando la actualidad
Cadista en el programa El Submarino amarillo de Onda Cádiz de nuevo sin su
clásico bigote.
Nota: Este artículo estaba acabado desde hace semanas esperando su momento para ser publicado pero ayer nos enteramos de una nueva aventura en su trayectoria que ha adelantado su publicación y nos obliga a actualizar: Ramón Blanco vuelve a ser entrenador del Cádiz CF.
4 comentarios:
Su suerte será la nuestra. aunque su fichaje demuestra que los nuevos dueños italianos de la entidad están tiesos como la mojama
Eah, pues ya se ha ido del Cádiz y sin conseguir ni un punto
http://www.portalcadista.com/index.php?option=com_content&view=article&id=16144%3Ablanco-dimite-como-entrenador-del-cadiz&catid=20%3AEl-equipo&Itemid=329
Hoy ha fallecido Ramón Blanco a los 61 años. Descanse en paz :-(
http://www.eldesmarque.com/betis/52886-fallece-el-exjugador-del-betis-ramon-blanco
Acabo de enterarme de la muerte de Ramón Blanco... RIP
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