jueves, 20 de diciembre de 2012

INVOLUCIÓN CAPILAR: GERARDO TORRADO


Buenas y elegantes tardes,

Más de uno al ver la foto me dirá, oiga Señor, “¡qué se ha equivocado, qué ha puesto las fotos al revés!” Y elegantemente yo le contestaré, pues no joven aspirante a pelón, resulta que hay casos de involución capilar que realmente sorprenden y cuando parece que aquellos maravillosos momentos delante del espejo para peinarse han llegado a su fin, remontan el vuelo (sin injertos a lo Rooney  mediante) y gozan de una extraordinaria salud capilar durante algunos años más.


Es el caso del aguerrido mejicano Gerardo Torrado, jugador nacido en el Distrito Federal cuando llegó al Sevilla procedente del Polideportivo Ejido tras haber peloteado en el Tenerife y en el Pumas, gozaba de unas interesantes entradas (tal y como podemos ver en la primera foto) que un año tornaron a modo calvo y brillante como una bola de billar como vemos en la siguiente imagen. Había truco. Estaba claro que Torrado se había afeitado la cabeza, pero la intención de ello yo creí que era para disimular una incipiente evolución de su entradas que como lava salida del volcán avanzaban imparables hacia su coronilla.

Y miren si estaba yo equivocado, que tras su salida del Sevilla (después de una espinosa polémica ya que el jugador era propietario del 40% de su pase al habérselo comprado a sí mismo -un caso único quizás- y no le quiso vender al club de Nervión su parte si éste no le subía la ficha, por lo que se le marginó a pesar que era un jugador de garra de los que tanto gustan en Nervión e internacional de México en nada más y nada menos que 137 internacionalidades a la fecha) y al recalar en el  Rácing de Santander la calvicie desapareció, pero no solo eso, sino que además en el Cruz Azul (equipo en el que juega desde 2005 y donde ha marcado golazos, muchos golazos) no solo no ha perdido pelo, sino que además se permitía lucir una salvaje y desbocada melena rizada que para sí querrían más de uno, incluso su amigo Valderrama, dándonosla con queso a todos los que pensamos que esa era una batalla perdida de Gerardo Torrado. Pues no amigos, que si el mejicano era un luchador en el campo, en la cúspide de su cabeza era un autentico doberman y aunque actualmente se haya recortado sus fieros rizos, como vemos en la última fotos, parece que guardará salud capilar durante muchos muchos años. Quizás el secreto sea ese, ser calvo al menos una vez en la vida por voluntad propia. Tomen ustedes buena nota. 


Torrado contra la calvicie: Uuuuuuh, susto.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

El que escribe estas cosas tiene toda la pinta de ser un calvo resentío.

Jean Sol Partre dijo...

Y qué me dices de Conte, el entrenador de la Juve, ese tío era calvo,¿no?

Señor dijo...

A/a Anónimo: Sabe usted, antes de inaugurar esta humilde sección tuve un momento de duda y pensé si era del todo adecuada no fuera a ser que alguien pudiera pensar que era un calvo con peluquín o que tenía algo contra los calvos. Me dio igual.

A/a Jean Sol Partre: Buena puntualización la de Conte (que no Nacho) si vemos esta foto de cuando era jugador, no creo que nadie hubiera apostado ni una mísera lira a que gozaría del look que tiene hoy en día, aunque me parece a mi que l ode Conte es una "huida hacia delante", también conocido como "peinado a lo Santi Millán"

Rafa dijo...

Torrado siempre irá ligado en mi recuerdo a entrar en el Tex Mex de Asunción a las tantas de la mañana y ver una entrevista que tenían colgada en la puerta de entrada del jugador en el restaurante y ponerme siempre a cantar “Torraaaaado, Torraaaaaado”. A mi me encantaba como jugador, no entiendo ese puteo al que le sometió la directiva… y ahí sigue jugando a buen nivel.

Rinat Rafaé dijo...

Jojojojo anda que no!! yo lo vi comiendo allí una vez cuando todavía estaba el de la guitarra cantandote hasta las 6 de la mañana.

AMOR ETERNO AL COMBO NACHO Y A LAS TETAS DE LA PANCHA!!

PD: Señor, se está usted convirtiendo en todo un maese de referencia en la materia capilar...