viernes, 31 de julio de 2015

SALVADOR JOSÉ MILHAZES AGRA

El mundo de los apodos es un mundo peligroso. Viene aquí un jugador y se le califica como La Pantera de Dakar y acaba siendo El Misifú de Nervión. Cuando yo era pequeño mi madre me decía que no le pusiera apodos a nadie porque el día que me pusieran uno a mí no me iba a gustar, pero es que es inevitable. Todos hemos tenido en clase al Negro, al Chino, al Cabeza y al Orejas entre otros. No se puede luchar contra la naturaleza humana.

Salvador Agra supo de esta verdad en cuantito nació. Allá por el 11 de Noviembre de 1991, en Vila do Conde, provincia de Portugal, cuando ya del tirón le pusieron el apodo más obvio, El niño de los Agra. Y allí que iba él de un lado para otro y todo el mundo “niño, niño” y él que veía herido su orgullo de hombre incipiente a medida que entraba en la adolescencia le decía a más de uno y una “¿niño? ¿quieres que te enseñe los pelos de los hue…?”


Ahí entraba en acción su madre que le decía “Niño, que no es para tanto. Esa beligerancia te la tienes que quitar de encima, más te vale hacer algo para desfogarte que no te va a salir novia y vas a ser El solterón de Grande Porto”.

Un inciso para indicar que todo esto se lo decía en portugués.

Salvador le hace caso a su madre y se apunta a las categorías inferiores del Varzim SC. El plan lo tenía todo, ya que dando leñazos podía descargar su agresividad y se echaría novia porque ya se sabe que los futbolistas follan mucho, de hecho ya que el Varzim es apodado Los Lobos de Mar, pues podría echarse una novia en cada puerto.

Al principio tuvo problemas. Llegó a las pruebas y con su 1.66 de estatura todos se reían de él y le llamaban El Tapón de Sagres pero recordando las sabias palabras de su madre se contuvo de saltar y pegarle un bocado en los cojones a quien le insultaba. Decidió hablar sobre el campo.

El entrenador vio que con esa estatura iba a saltar menos que un lavabo así que mejor que pusiera él los balones a la olla, y lo colocó de extremo. De repente un rayo recorría la banda derecha del campo y nadie podía pararlo. Todos se llevaron las manos a la cabeza. Tenían ante ellos el próximo crack portugués.

Se ganó el nuevo apodo de La Bala Povoeira, aunque cuando tenía un mal día no había quien le soltaba que más que bala era El Petardo de Varzim.

Con 18 años llega al primer equipo del Varzim SC a disputar la Liga de Honra (Segunda División portuguesa) y el Olhanense de la primera categoría lo firma para la temporada 2011-12.

En el Algarve sigue su progresión meteórica, empieza a acudir a las categorías inferiores de la Selección Portuguesa y, como bien saben esos redactores de la Guía Marca que no dudaron en su día de calificar en la ficha correspondiente a Pablo Piatti o Brian Sarmiento como El nuevo Messi la gente empieza a calificar a cada jovencito portugués prometedor como El nuevo Serresiete.

Y es en éstas cuando firma por el Betis. En pleno Enero de 2012, porque tiene tantos equipos tras él que más vale adelantarse. Se queda en el Algarve hasta final de temporada, pero para las 2012-13 es verdiblanco.

El fichaje es ilusionante. El Serresiete bético, El Joaquín luso, El crack de Olhao, todo vale para calificar a un jugador que, cuando salta al campo corre, y corre, y corre, y corre, y…¿a dónde va? Ni idea, ¿lo sabes tú? Porque yo no…

Juega 10 partidos, siete como titular y hace un gol un tanto churrero al Atlético de Madrid. Pepe Mel no lo termina de ver claro con él, se tira de los pel…perdón, se desgañita pidiéndole asistencias que el portugués no termina de dar, y total, que al final lo de El nuevo Serresiete lo metemos en el cajón, que para un tío que sólo corre que mejor fichemos a Pentinel, y que el apodo que de verdad califica su paso por Sevilla no es otro que el de El Odonkor del Algarve.

En el mercado invernal es cedido al Siena donde no juega mucho, y para la temporada siguiente continúa un rosario de cesiones. La primera mitad de la 2013-14 la pasa en el Sporting de Braga y la segunda en la Académica de Coimbra, dejando en total 13 minutos de highlights, y volviendo a Braga para la 2014-15. Cada verano desde entonces aparece por Los Bermejales y la gente se mira entre sí sorprendida preguntándose si ese todavía anda por aquí.

Finalmente, a finales de Julio de 2015, se desvincula del conjunto bético, con un paso tan olvidable que, en el futuro será recordado como El jugador ese portugués chiquinino que vino que corría mucho cómo se llamaba coño…

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo habéis dejado?

Rinat Rafaé dijo...

Hola amigos anónimo. "Dejado" no es quizás el término pero por mi parte (Rinat Rafaé) estoy en un retiro voluntario indefinido del cual no tengo intención de salir por ahora... Tengo que dar oportunas explicaciones y llevo un mes queriendo hacerlo pero por una cosa u otra (estaba muy agusto de vacaciones bajo mi palmera petada de cocos) aun no he podido hacerlo.

El resto de autores tienen la web abierta para cuando ellos dispongan (aunque estaban todos un poco "desaparecidos", la verdad).

A ver si me animo y me pongo con esa entrada "final" que tendría que haberse publicado el 1 de agosto... que ya voy un poco tarde.

PD: ¡¡Muchas gracias por tu interés!! :-)

Anónimo dijo...

Pues me dejas ojiplático, aunque podré releer las entradas y así rebajar la ansiedad.
Podrías aprovechar la rueda de prensa de Piqué y dar las explicaciones con él. De todos modos no tienes que darlas, me basta con los buenos ratos y las risas que me has regalado.
Un sbrazo