lunes, 26 de diciembre de 2011

LAS BOTAS BLANCAS DE ALFONSO

En ocasiones, un simple color puede cambiar la manera de ver las cosas, y marcar tendencias (hasta nuestros días). Así lo demuestra el color blanco de las botas blancas de Alfonso. Hoy en día, es normal ver a los futbolistas con botas de todos los colores posibles, pero antiguamente, todos llevaban las botas negras. Aunque con Alfonso, autor de un gol muy famoso, la tendencia cambió. 
 
A mediados de los 90, Joma, conocida marca deportiva que calzaba Alfonso, le suministró al delantero madrileño unas botas blancas. Pronto causaron sensación, ya que ver a un jugador con unas botas que no fueran negras era algo innovador. Alfonso las siguió calzando prácticamente hasta el final de su carrera, pero la cosa no se quedó ahí, ya marcó tendencia: ¿quién no recuerda las botas rojas de Morientes? Luego muchos se apuntaron a eso de tener botas de distintos colores: azul, verde, amarillo... Luego vinieron botas rayadas (como las Adidas Predator), con números (como las Total 90)... E incluso con lunares (las botas de Cristiano Ronaldo, que sinceramente me parecen una aberración). Hoy en día, unas botas blancas no son nada raras, pero en su día, lo eran. Alfonso fue un pionero en su día, sentó un precedente. Grande Alfonsito (pero que bonitos son sus goles).

Artículo cortesía de Dani

5 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Míticas! Yo tenía unas y me duraron la tira

Jose MME dijo...

Hay que decir que, de cara a las Navidades 97-98, para que los niños dieran por culo a los papás, durante unos pocos partidos llevó unas verdes que estrenó en Gijón antes de volver al blanco. Maniobra de marketing.

Dani dijo...

Coño, las botas verdes también fueron una sensación. Uno de mis mejores amigos no paró hasta conseguirlas por aquella época.

Anónimo dijo...

Yo me compré las verdes y cuando se me quedaron chicas, me compré las botas de Alfonso pero en azul.

P.D. Las llegué a ver además amarillas y también negras.

Dani dijo...

Por cierto, el otro día vi en un bar a un hombre con las botas verdes de Alfonso...
Y yo que creía que nunca más las volvería a ver...