martes, 9 de septiembre de 2014

HIROSHI IBUSUKI


No han sido pocas las ocasiones en las que hemos acusado al Betis de ser a veces demasiado extravagante en sus fichajes,  vale que quizás ha sido el único equipo del mundo que ha tenido en sus filas y al mismo tiempo un brasileño rubio, un alemán negro y que fichó a un suizo vago y un argentino sin sangre, pero en todos lados e cuecen habas, solo hace falta echar un vistazo a la acera de enfrente para encontrarnos un caso de jugador que rompe por completo con el estereotipo de sus país de origen y el mejor ejemplo lo tenemos en Hiroshi Ibusuki, quizás el único japonés de dos metros y morenazo de piel que existe sobre la faz de la tierra.

La historia de Hiroshi es la de cualquier niño japonés que juega al fútbol. Nacido en Nagareyama el 27 de febrero de 1991, su madre era ama de casa y su padre capitán de barco, por lo que pasaba largas temporadas fuera de casa. Esa falta de una figura paternal el niño la suplía con un balón desde que a los tres años éste le amortiguara el golpe de un coche que le atropelló. A pesar de que el balón estaba deshilachado, sin la mayoría de parches originales y con los pocos que aun sobrevivían lo hacían pendiendo de un hilo, el  pequeño siempre iba pegado a él el cual consideraba su único y verdadero compañero. "Eres mi mejor amigo" le repetía continuamente a su pelota mientras su madre marcaba el número del psicólogo infantil ciertamente alarmada.

En uno de sus largos viajes su padre conoció a Ronaldinho una ex estrella del fútbol brasileño venida a menos que padecía ciertos problemas de alcoholismo y chica fue la fiesta que se tuvo que pegar con él porque le convenció para que se fuera con a Japón con el objetivo de acompañar y ser el mentor futbolístico del joven Hiroshi en sus primeros días en Nankatsu ciudad a la que se había mudado hacia pocas semanas.

Hiroshi pronto entró en el Niupi, un equipo local de aspiraciones modestas que ni siquiera tenía un campo donde realizar sus entrenos semanales. La llegada de Hiroshi acompañado de Ronaldinho como nuevo entrenador les hizo progresar logrando incluso alzarse con el prestigioso campeonato colegial de la localidad ante sus eternos rivales del San Francis, que contaban con el mejor portero joven del país. Ronaldinho también ayudó a Hiroshi a desarrollar su jugada especial de nombre vacilón, necesaria al parecer para cualquier jugador japonés de nivel que se precie que debe tener una de estas (el tiro del tigre, la catapulta infernal, el tiro combinado...) su jugada elegida fue el cabezazo del puerco que consistía en empujar el balón con violencia con la cabeza mientras emitía un sonido que asustaba a los rivales.  Gracias a este espectacular remate consiguió llamar la atención de los ojeadores del New Team, un equipo impulsado por un capital extranjero capitaneado por un jeque que pretendía crear un equipo de la nada (por si alguno no sabe japonés, New Team significa Equipo Nuevo) que aglutinara los mejores jugadores de la zona. Con el New Team Hiroshi consiguió dos campeonatos locales y además grandes éxitos con las categorías inferiores de la selección japonesa. Parecía que estaba preparado para cumplir su sueño de irse con Ronaldinho a jugar a Brasil pero en el último momento éste lo dejó tirado y se largó sin decir adiós, lo que sumió al chico en una pequeña decepción, aun así él era fuerte y sabía que entrenando todos los días en la playa pegándole crujinazos a las olas su oportunidad llegaría. No podía venirse abajo.

Su frustrado fichaje por un equipo brasileño hizo mover ficha a los directores deportivos de media Europa que consideraban que el que es bueno en Japón es bueno en el viejo continente y que el chico estaba en el momento perfecto para dar el salto a unos de los grandes, motivo por el que tras mucho valorar las ofertas que le llegaron de varios equipos punteros se decidió por aceptar la del Cataluña FC. Ilusionado Hiroshi se pensó que con ese nombre su destino era el FC Barcelona, pero engañado por un agente sin escrupulos que se dedicaba a mercadear con jugadores asiáticos acabó en el Girona, donde rápidamente se gana el cariño de los aficionados que incluso montan una peña con su nombre, la Penya Ibusuki Hiroshi Girona F.C. Aunque el carismático y espigado nipón se metió a la grada en el bolsillo aun estaba muy verde para la exigente segunda división, por lo que se acordó su cesión al Zaragoza B para que se foguease, equipo en el que Hiroshi, ahora si, comenzó a demostrar sus verdaderas virtudes siendo uno de los máximos goleadores del equipo.

Su espectacular progresión llamó la atención de otro grande del fútbol catalán, el Sabadell, al que llega cedido y donde Hiroshi esta vez si deja su impronta goleadora, anotando goles de muy bella factura no solo con su característico cabezazo del puerco, sino también con otro tipo de jugadas habituales en su repertorio tales como la chilena tras saltar 6 metros hacia arriba, el tiro combinado con un compañero que le da un efecto diabólico al balón o el bujío a caraperro que rompe las manos, los guantes del portero, la red, el muro y deja KO a varios aficionados.

Estas jugadas empezaron a ser muy comentadas en los corrillos futbolísticos siendo varias las ofertas recibidas por el jugador que finalmente se decide por la  del Sevilla FC, en principio para formar parte del filial, aunque con la esperanza de llegar pronto al primer equipo, oportunidad que le llegaría en enero tras convertirse en la referencia goleadora del Sevilla Atlético y en nada más y nada menos que un derbi sevillano. Era el 21 de enero de 2012 y con empate a 1 en el marcador Marcelino decidió que dado que ese derbi era importante para los chicos de la cantera, como premio le daría la oportunidad a uno de ellos que podría disputar los últimos cinco minutos del encuentro y se decidió por el nagareyameño, que se sentía tan sevillano que había adoptado las costumbres propias de la tierra.

Los siete minutos disputados en uno de los partidos más importantes de la élite futbolística le dieron alas para continuar con su buen hacer en el filial de tal forma que al final de temporada se alza con el trofeo al máximo goleador de la categoría tras anotar 20 goles.

Se podría pensar que tras este éxito promocionó al primer equipo, pero no. En los años venideros el Sevilla ignora sus números y lo va cediendo a distintos clubs como el interesante KAS Eupen belga o el Valencia Mestalla (donde le dan de cenar), para finalmente traspasarlo este verano al Debreceni, campeón de la liga húngara, terminando así su sueño de ser una estrella en la capital hispalense. 

Quizás no triunfara en la primera división, pero el fútbol es más que eso y por mucho que sucediera en el terreno Hiroshi siempre se ha ido haciendo gran amigo de sus rivales y compañeros. Equipo con el que se enfrenta, se hace colega del crack y allá donde esté siempre tiene tiempo para mandarse unos videos cachondos vía whattsapp con ellos. Si quien tiene un amigo tiene un tesoro, Hiroshi tiene decenas de ellos: Tom Baker, Mark Lenders, Benji Price, Dani Mellow, Bruce Harper, Roque Santa Cruz, Paul Diamond, Julian Ross, James y Jason Terrick, Philip Callaham, Miriam Díaz-Aroca, Karl Hanz Schneider, Ed Warner, Shino Ryuji, Clifford Yumas, Bertín Osborne o Alan Crocket son algunos ejemplos.

6 comentarios:

Alejandro75 dijo...

Estáis haciendo una sutil referencia a una serie de dibujos animados que no alcanzo a recordar...alguien puede echarme una mano?

PeJiBi dijo...

¿Puede ser quizás a aquella de un niño que se llamaba Rafael que tenñia un perro que se llamaba Maradona y cuyo nombre no recuerdo?

José María dijo...

Otro fichajito del inefable Víctor Orta y su antena parabólica que llegaba a todos lados del mundo y podía seguir a todas las perlas del mercado. Ahora falta una entrada a otros 2 fichajes gloriosos de él con el visto bueno de Monchi:La pantera negra Cristian Pouga y el gran Miroslav Stevanovic osea el nuevo Jugovic.

Rinat Rafaé dijo...

Pues fijese Jose María que a Hiroshi no lo he calificado de amigo de Colusso, más que nada porque se encuentra en un limbo legal por el cual, dado que se fichó por el Sevilla Atlético, y que su rendimiento en el filial fue más que bueno (quedó pichichi de 2ªB) no podemos considerarlo un "amigo de Colusso"

El tío jugó una temporada y metió 20 goles... quizás se podría haber confiado una mijita na más en él, no se...

Stevanovic caerá un día de estos...

Alfonsobis dijo...

Te ha faltado decir que Ronaldinho se ventilaba a la madre de Hiroshi.

Anónimo dijo...

hasta la camiseta del Sevilla At. estaba guapa con LiNing. Warrior cuanto te odio!