lunes, 23 de septiembre de 2013

ALHAJI MANGA NGUM (EL AMIGO DE BIRI BIRI)


Cuenta la leyenda que en el año 1973 el Real Betis apalabró el fichaje de un exótico delantero que jugaba en Dinamarca, un tal Alhaji Momodo Nije conocido como Biri Biri.  Como en aquella época los medios de comunicación eran escasos y no había un seguimiento de todos y cada uno de los movimientos de los equipos, los aficionados no solían saber de las incorporaciones hasta que el jugador no hubiera firmado o sido presentado, por lo que poca gente se enteró del interés bético. Sea como fuere, parece que los de Heliopolis pretendían que el jugador cogiera un taxi y se reuniera con ellos en sus instalaciones, pero claro, pretender que un gambiano sin ni papa de español aterrizara en el antiguo aeropuerto de San Pablo, cogiera un taxi y se presente en el Villamarín es como pretender que Babá Diawará sea candidato al balón de oro, así que enterados de la operación y dado que también venían siguiendo al jugador, la directiva sevillista acudió al aeropuerto, lo recogieron, se lo llevaron y lo ficharon horas después. 


No sé si esta anécdota es cierta o no, pero en caso de que lo fuera parece lógico que Biri Biri aceptara la oferta del Sevilla, no solo porque fueran a recogerle y no le dejaran en manos de cualquier despiadado taxista capaz de llevarlo a Córdoba ida y vuelta con tal de pegarle el sablazo al africano, si no porque además le reservaron habitación en la Pensión Florentina de la Gran Plaza y para que no se sintiera solo le trajeron a un amigo al que incorporaron al equipo. Este amigo es nuestro protagonista de hoy: Manga.


Alhaji Manga Ngum (o Manga Ngum Wallidan o todo a la vez, he encontrado ambos nombres) era un lateral derecho tan atlético y fuerte como penco en defensa ya que los delanteros rivales se iban de él una y otra vez, obviamente no tenía nivel para el Sevilla (a pesar de que por aquel entonces se encontraba en Segunda), pero le hacía compañía a Biri Biri (lo que no era baladí porque famosas eran sus escapadas a Gambia aquejado de una enorme morriña cuando se fue su amigo), así que le hacían jugar con el Sevilla Atlético de vez en cuando o en la Copa Andalucía, competición que solían jugar los suplentes, los canteranos o aquellos jugadores recién salidos de una lesión.


Al poco de llegar en el caluroso y sofocante agosto de 1973, Biri y Biri y Manga se fueron al estadio donde se estaba disputando el Trofeo Ciudad de Sevilla, al verlos pasar la gente los miraba como si fueran extraterrestres ya que llamaban mucho la atención pues por aquel entonces no era normal ver a africanos negros por la ciudad. Tras el partido y para empezar a congeniar con sus compañeros se fueron al hotel Acuario, donde estaba concentrado el equipo y se sentaron a comer junto con toda la plantilla. Una vez terminaron de comer y como era su costumbre, empezaron a desperezarse y a eructar, lo que puso de muy mala leche al entrenador Happel y dejó atónitos al resto de la plantilla que como recordaba Pablo Blanco pesaron “estos tíos son capaces de comernos crudos”


Deportivamente no hay mucho que contar del amigo del otrora ídolo sevillista, ya que como decimos apenas jugó algunas pachangas pero a pesar de no destacar futbolísticamente, su presencia despertaba expectación allá donde fuera, así por ejemplo fue – junto a Biri Biri - el gran animador de la taquilla en aquel partido de la Copa de Andalucía que ganó el Recreativo de Huelva por 3-0 en el partido que se presentaba Martínez Jayo, convirtiéndose en protagonista absoluto cuando faltaba su compatriota como sucedió en aquel partido amistoso en Cabra.


En escasos partidos más se puso Manga la camiseta del Sevilla. Un amistoso contra el Brenes, un partido de Copa de Andalucía contra el Granada y en el partido benéfico homenaje a Manuel Alvear Palma, portero del Tocina que murió a causa de un balonazo en el estomago, formando parte de la selección Sevilla-Betis que formó para la ocasión donde coincidió por cierto con el bético Añoño, el padre de Puerta.


Pero aunque futbolísticamente no dejaría huella el equipo lo acogió con mucho cariño, ganándose la amistad de la plantilla y contagiandose de las costumbres autoctonas; motivo por el que en un partido de Copa de Andalucía, tras marcar un gol San José, Manga no se lo pensó dos veces y lo cogió a hombros (como había visto hacer a los toreros) e incluso intentó darle la vuelta al campo para regocijo de los presentes. También era mucho de acudir a fiestas flamencas junto a varios compañeros Sevilla, a pesar de que cada vez que junto a su compadre escuchaba unos tambores, ambos empezaban a llorar diciendo que le recordaban a su tierra.


Finalmente cuando pudieron traer a la familia de Biri Biri a Sevilla la función de carabina que le había asignado el club había concluido, por lo que se marchó desconociendo por completo cual fue su trayectoria posterior o incluso si siguió jugando al fútbol.


Manga falleció en septiembre de 2003 debido a unos problemas de estomago. Quizás no fue tan famoso como Biri Biri, ni le dedicaron una peña, ni salió anunciando pisos del Parque Alcosa y ni siquiera mucha gente acuerda de él, pero los que lo hacen siempre destacan su contagiosa simpatía y alegría… y lo rematadamente malísimo que era.


PD: Agradecerle a nuestro buen amigo Carrascus la grandísima aportación de las fotos que ilustran esta entrada.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Manga vino aquí a mangá

Señor dijo...

Joder, vaya brazacos que gastaba el amigo, normal que a Manga le quede la camiseta corta de mangas.

(venga ¡Festival del humor con la palabra "manga"!)

PD: genial el anuncio de Biri Biri, me ha convencido para adquirir una propiedad en el PArque Alcosa.

Rinat Rafaé dijo...

Juro que estuve tentado en hacer algún chascarrillo con algún símil de "Manga", pero finalmente desistí de la idea, jejejeje

Anónimo dijo...

Los brazos se le salen de la MANGA y las calzonas le quedan como un TANGA.

Menos mal que Biri Biri fue una GANGA

carrascus dijo...

Con Manga no sé yo si hacían algún chascarrillo sus compis en el vestuario, pero me consta que a Biri-Biri le decían "el Coca-Cola familiar" los demás futbolistas del Sevilla.

Alfonsobis dijo...

Todos queremos entradas de jugadores que hemos visto jugar (y sufrido) en la época contemporánea, pero reconozco que estos artículos de anécdotas y jugadores desconocidos del año catapun cada vez me gustan más.

Rinat Rafaé dijo...

Gracias Alfonsobis! A nosotros nos encantan y la verdad es que son las más divertidas de hacer y no se si en un "harakiri" comercial para el blog, los últimos en lso que por lo menos yo estoy trabajando son del mismo palo... intentaremos intercalarlos con otros más conocidos para que no dejen de visitarnos!