miércoles, 23 de diciembre de 2015

JORGE CASADO RODRÍGUEZ

Corría el año 1988 y el matrimonio Moreno Fuertes estaba en crisis. La llegada al mundo del pequeño Juanfran daba problemas para llegar a fin de mes porque el chiquillo comía como una lima y destrozaba los pañales a base de bien. Fue cuando al Señor Moreno se le ocurrió una novedosa idea para ganar dinerito fresco.

Sin decirle nada a su esposa marchó una mañana a una clínica local vestido de incógnito. Tras conversar con la persona que se encontraba tras el mostrador le dieron un formulario a rellenar. Lo entregó y se sentó a esperar la llamada, que llegaría poco después. Una amable y sonriente enfermera le dio un pequeño bote de plástico y le invitó a pasar a una estancia privada. "Ahí tiene un sofá para ponerse cómodo. Tiene a su disposición todos los números de Interviú donde haya salido una novia de Kiko Rivera y el DVD de 'Zombies calientes del Getafe' a su disposición".

El buen hombre tuvo sus problemas. La situación era raruna, no conseguía que eso saliera adelante. Cerró los ojos y decidió concentrarse para rememorar un momento de su vida que le provocara la máxima excitación. Y el momento elegido no fue otro que la asistencia que dio mediante un saque de banda y que permitió a la clase de 6º de EGB de la que formaba parte ganar el torneo del colegio. Ese superpoder se transmitió a través de su brazo al producto con el que rellenaba el bote. El saque de banda sería la mejor (la única) cualidad del futuro retoño futbolísticamente hablando.

Pero de eso el Señor Moreno nunca fue consciente, porque quién crió a ese retoño fue el matrimonio Casado Rodríguez, que llamó Jorge al bebé que tuvieron mediante fecundación in vitro en la misma clínica de Madrid el 26 de Junio de 1989.

O quizá si lo fue, porque por lo menos arquearía una ceja al ver que su hijo Juanfran coincidía en la cantera del Real Madrid con otro lateral, aunque esta vez zurdo, igual de cortito y que también estaría en el filial merengue hasta los 56 años de edad.

Compartir la gran mayoría del ADN es lo que tiene. Juanfran y Casado eran casi lo mismo. La secretaría técnica del Betis lo notó inconscientemente y ficharon a uno al irse el otro en verano de 2014, ya que al ver los vídeos pertinentes las sensaciones eran parecidas.

Y también el público tuvo sensaciones parecidas, aunque por lo menos Casado resultó ser más prudente y no pasará a la historia por ser tan chufla como su no reconocido hermano de padre, sino por una demoledora estadística. Durante las primeras 13 jornadas jugó ocho partidos, en los que el Betis ganó tres, empató tres y perdió dos. En la jornada 14 no jugó y el Betis perdió, pero esto no volvió a ocurrir hasta 16 partidos después, justo cuando Casado volvió a saltar al campo. Gafe es poco.

Tras jugar un total de 15 partidos, 14 como titular, se decide darle la baja, y como hiciera Juanfran se marcha a un equipo azul y blanco de una zona con mucho frío, en este caso la Ponferradina.

Y el Señor Moreno le ve hoy día y, recordando aquella visita a aquella clínica, no puede más que arquear una ceja.

1 comentario:

Alfonsobis dijo...

Jose MME eres un crack.